enero 29, 2025
Maretazos en Perú: prevención y acción compartida
BY: Jesús Cuzcano
Topics:
Los maretazos son fenómenos oceánicos donde las olas del mar incrementan su tamaño y energía por la fuerza del viento, y nuestro país está expuesto a estos con regularidad. Sin embargo, todos nos preguntamos por qué las consecuencias siempre nos afectan de la misma manera. Improvisación por parte del Estado y falta de cumplimiento de las acciones preventivas por parte de la población son el caldo de cultivo para que la fuerza del mar arrase con las economías costeras que se sustentan en la pesca y el turismo. Juan Carlos Riveros, director científico de Oceana Perú, expone las causas y propuestas de solución para mitigar los efectos de los maretazos.
#Maretazo |⚠️¡Un desastre anunciado que pudo prevenirse!⚠️
La crecida norte más devastadora en décadas ha dejado a decenas de pescadores artesanales sin sus herramientas de trabajo. A pesar de las alertas de la @MGP_DICAPI sobre fuertes oleajes, la magnitud del evento superó… pic.twitter.com/rMFafmvHgM
— Oceana Perú (@Oceana_Peru) December 28, 2024
¿Qué fenómeno en particular causó los maretazos tan intensos ocurridos en el norte peruano en diciembre de 2024?
El origen no es local, sino regional. Son varios frentes de vientos que comienzan a soplar muy fuerte en medio del Pacífico norte. En este momento el clima está muy desequilibrado a nivel global y las olas y el viento son la forma como se redistribuye la energía del planeta. Asimismo, Perú tiene mayor exposición a corrientes muy fuertes del lado oeste por la dirección en la que gira la Tierra. Entonces todo se junta para generar los maretazos, que nuestro país los recibe con cierta regularidad, solo que la última vez fueron muy fuertes. Aparte hay que tener en cuenta la fase lunar, ya que la luna nueva y luna llena coinciden con las mareas más pronunciadas y fuertes.
Si los maretazos ocurren con regularidad y el sector está al tanto, ¿por qué siguen afectando a las comunidades costeras?
Porque hay improvisación en la respuesta y poca capacidad del Estado para comunicar con un sentido de urgencia. También se suma la ausencia de una cultura de prevención, un manejo inadecuado de los riesgos y la escasa llegada del Estado a los actores involucrados o, cuando llega, no le creen. En pocas palabras, falta de credibilidad y confianza. Todo esto unido a una falta de estructuras adecuadas. Muchos desembarcaderos pesqueros artesanales no tienen condiciones de seguridad. En los maretazos recientes del norte, tengo entendido que por suerte no hubo accidentados graves, pero igual está mal que no se hayan cerrado al público las estructuras que estaban expuestas. Finalmente, parte de nuestra cultura es ocupar y ocupar el espacio. La Marina, por ley, establece que los 50 metros de la marea alta deben estar libres de estructuras no autorizadas y nadie respeta eso, sino que se instalan estructuras precarias.
¿Y qué pueden hacer las autoridades para evitar que la gente se exponga a estas situaciones?
La Dirección General de Capitanías y Guardacostas (DICAPI) tiene la competencia de regular quién entra al espacio marítimo y la Marina tiene que cerrar los puertos, pero se debe tener en cuenta que no hay suficiente personal y no tienen todos los recursos. Los oficiales de la Marina tienen la autoridad para decir que al mar no entra nadie, pero no los respetan. La ley puede ser imperfecta a veces y causar problemas o malestar a la gente. Sin embargo, si se le enseña las ventajas de acatar y por qué hay una ley, al final las personas tienen la obligación de respetarla. Además, es necesario educar sobre las consecuencias de no cumplir la ley, como la exposición a que se le rompa el barco a un pescador, a que el agua le golpee y hasta a perder la vida. Todo esto ocurre por la propia responsabilidad de no respetar las regulaciones.
¿Cómo fortalecer los sistemas de alerta temprana?
Necesitamos un sistema de alerta que esté conectado a medidas de contingencia, preparación y respuesta rápida. Para ello es importante saber, por ejemplo, cuáles son los puntos en los que los pescadores podrían guardar su barco en caso de un maretazo súbito, qué hacemos con los que no tienen recursos para mover su barco y cómo vamos a actuar en los muelles. La autoridad tiene que dar medidas de control, prevención y refugio, e imponerse si es necesario. No podemos responder improvisando. Hacemos simulacros de sismo y maremoto. ¿Cuántos simulacros de maretazos hacemos?
¿Qué estrategias se pueden proponer para que las comunidades locales afectadas se recuperen rápidamente?
En primer lugar, PRODUCE ha establecido un sistema de créditos de S/. 1 millón para fomentar la reconstrucción de los botes artesanales afectados que cuenten con matrícula. Esto puede cubrir los costos a mediano plazo. No va a cambiar la vida de todos, pero por lo menos va a ayudar a que 20 o 30 botes se recuperen. En segundo lugar, se debería promover la actividad turística a través de paquetes y promoción de los lugares que están en buenas condiciones. Recordemos que, si no hay turismo ni actividad pesquera en el norte, también es porque hubo un derrame de petróleo. En el tema de los maretazos, por ahora, todo estará calmado aproximadamente hasta Semana Santa, ya que en abril vuelven las mareas fuertes.