marzo 27, 2023
¿Cómo impactará la gripe aviar H5N1 en la fauna marina?
BY: Oceana
En los últimos meses se reportaron diversos casos de animales marinos varados o moribundos a lo largo de nuestro litoral. Esto puso en alerta a grupos de activistas y vecinos de diversos distritos, quienes empezaron a rescatarlos. Lamentablemente, ignoraban el riesgo al que se exponían: los análisis realizados por especialistas del Servicio Nacional Forestal y de Fauna Silvestre (SERFOR) revelaron en dichos animales la presencia del virus de la gripe aviar.
Los primeros casos de gripe o influenza aviar se reportaron en Italia a fines del siglo XIX, pero su origen viral recién fue confirmado en 1955. La actual cepa dominante, conocida como H5N1, fue identificada por primera vez en China en 1996 en gansos silvestres. Desde ahí pasó a Europa a través de aves silvestres migratorias portadoras del virus. La expansión de estas a las aves de corral motivó su sacrificio y diversas medidas de control para prevenir el contagio. Sin embargo, se reconoce que el virus tiene reservorios en las poblaciones de aves silvestres, principalmente acuáticas como patos y gaviotas. Por ello, cada año, con los movimientos de migración y los cambios de estación, se reactivan las alarmas para contener esta enfermedad. En 2022, la gripe aviar tuvo un fuerte impacto en la industria avícola de Estados Unidos con más de cincuenta mil millones de aves de corral sacrificadas.
A partir de setiembre del año pasado, el virus se desplazó paulatinamente a lo largo de América del Sur hasta alcanzar Chile y Argentina, transportado por aves migratorias. En el Perú, las primeras alertas se dispararon a fines de octubre entre los investigadores y los encargados de las áreas protegidas. Las principales especies afectadas han sido las aves guaneras como los pelícanos, cuyas densas colonias facilitan la transmisión de la enfermedad entre los individuos. Además, se han reportado casos en guanayes, piqueros, pingüinos de Humboldt y otras especies. Se calcula que han sido infectadas al menos veinte especies diferentes de aves silvestres y se contabilizan más de 120 000 individuos muertos, según el SERFOR.
El contagio entre diferentes especies de aves no resulta extraño por las características del virus, que prefiere acoplarse a receptores celulares específicos de este grupo. Sin embargo, en Perú se ha reportado la mortalidad masiva de lobos marinos, lo que ha puesto en discusión la posibilidad de contagio directo entre ellos. En principio, se ha observado que algunos de estos animales atacan a las aves marinas que están a su alcance. No es de extrañar que los pelícanos u otras aves enfermas incapaces de volar hayan sido devoradas por estos y que de este modo adquirieron la enfermedad. Lo que resulta extraño es el alto número (más de 600 hasta la fecha) que se han categorizado como infectados a partir de sus necropsias. La confirmación de la infección por el virus H5N1 no ha concluido aún debido al costo de los análisis requeridos.
La posibilidad de contagio directo entre mamíferos como los lobos marinos abre la puerta a un posible mayor riesgo de contagio hacia seres humanos. Si alguna mutación del virus resulta en una mayor posibilidad de acople directo con nuestras células tendría graves consecuencias para nosotros. Hasta la fecha, el paso del virus a mamíferos sólo ocurre por contacto directo con animales enfermos y sus fluidos (saliva, sangre, heces, etc.), por lo cual los pocos casos que se han detectado en humanos se han limitado a personas que tenían un contacto estrecho con aves de corral como en granjas y camales. No está demás agregar que la enfermedad en humanos sigue un proceso de deterioro muy agresivo con elevadas tasas de mortalidad.
Desafortunadamente, nada se puede hacer con los animales silvestres que sean afectados por la gripe aviar. Aparte de reportar la presencia de animales enfermos o muertos a las autoridades correspondientes, es importante no acercarse a ellos o tratar de ayudarlos, pues el riesgo para nuestra salud es demasiado alto. Esta situación se debe dejar en manos de personas con los equipos de protección personal y el entrenamiento adecuados. También hay que evitar que nuestras mascotas se expongan al virus, pues aparte de contagiarse podrían transmitir la enfermedad mediante la saliva.
Asimismo, es probable es que, al igual que en Europa y Estados Unidos, la gripe aviar H5N1 se quede con nosotros en reservorios naturales de aves silvestres. Por ello, es preciso que se refuercen los mecanismos de control y vigilancia que están a cargo del Servicio de Sanidad Agraria (SENASA). Aparentemente este sistema ha funcionado, pues el único caso reportado en el Perú, en la región Lambayeque, fue controlado a tiempo. Además, se ofrecerán refuerzos de la vacuna contra la gripe aviar para ser aplicados de manera masiva en las granjas locales.
Según los especialistas, tendremos que aprender a convivir con el H5N1 y sus variantes en el futuro. Nuestras mejores herramientas para impedir el paso del virus a los seres humanos son la prevención y el cuidado en nuestro contacto con la fauna silvestre, en particular las aves. Por eso es fundamental frenar el tráfico de fauna y abstenerse de recoger animales heridos o en malas condiciones. Hay que reportar estos incidentes a las autoridades locales y vigilar que se ejecuten las acciones de control sanitario requeridas.